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Quien soy

Nací un 28 de Noviembre hace ya 60 años, en la misma fecha de cumpleaños de mi madre y mi abuelo. Una fecha especial en mi familia. Mi hermana menor también nació ese día. Pero estas son apenas fechas que hablan del inicio de una historia que intentaré relatarles:
Soy ingeniero civil de la Universidad de Chile, magister en Biología Cultural y empresario independiente. Pero ojo, estas son etiquetas sin demasiada importancia. Títulos que no hablan de mí.
También soy abuelo reciente de 3 nietas y un nieto... un título maravilloso que aun me cuesta usar.
Padre de 3 hombres que están formando sus familias, con demasiado entusiasmo parece...
Esposo de una gran mujer, profesora e instructora y sobre todo, compañera de aventuras. Aunque estos papeles son más etiquetas, otros descriptores que oscurecen mi esencia.
También podría decir que soy una persona que actualmente se siente feliz, que ha recorrido un sinuoso camino lleno de algunos éxitos y por supuesto, salpicado de aprendizajes que me han hecho crecer y cambiar mi manera de pensar. Mis ancestros, mi historia y trayectoria, además de mis errores, me han convertido en la historia que muchos cuentan de mi. Puros cuentos. Inventos. Porque nuestras experiencias no nos representan bien. Aclaro que a todos aquellos que se han cruzado en mi camino les agradezco por su influencia y les pido perdón si alguno fue herido por mi falta de conciencia. Pero tampoco soy ni mis aciertos ni mis errores. 
Puedo hablar más de mis conductas: Intento ampliar mi mente cada día aprendiendo algo nuevo, lo que me hace sentirme joven y lleno de entusiasmo por la vida. Me gusta el deporte y me mantengo haciendo actividad física pero compitiendo cada vez menos. Admiro la gente inteligente y disfruto de las conversaciones profundas. Amo la vida en toda sus expresiones y reconozco que  en esta aventura vital he aprendido (lenta pero progresivamente) a ser menos egoísta y más flexible. Pero mis acciones o intereses tampoco son mi verdadera identidad.
Tengo claro que aun me queda mucho por aprender, pero sé que no soy ninguna de las explicaciones anteriores. Sé que hay algo en mi que no cambia. Algo que permanece constante. Supongo que se trata de mi alma. O de mi conciencia. Ese observador que experimenta la vida. Me siento parte de un Universo plenamente interconectado que demuestra paradójicamente el aumento del conocimiento y de nuestra ignorancia y multiplica los vínculos invisibles que tenemos con la realidad.
Intuyo que mi alma y la tuya, provienen de la misma fuente. Que somos una perspectiva de esa Conciencia colectiva que crea el Cosmos para conocerse mejor. Sospecho que yo, tu y él, somos lo mismo. Somos Nosotros tomando conciencia de nuestro origen espiritual. Algo de eso me parece reconocer al mirarme al espejo...

Los secretos del escarabajo